Hola, voy a describir una de mis múltiples cogorzas a las que
uno se ha sometido…durante todos estos años de castigo hepático,
ya podría haberle puesto un piso a mi maltrecho hígado.
Esto sucedió una noche de septiembre en una zona de playa del
literal gerundense, camino del sur de Francia. Fué una noche de
parada técnica, pensada para una salidita de semi-trámite, para
no pegarnos una panzada de vehículo…pero al final resultó ser
un crédito cofidis para mi cabeza y el resto del viaje.
Al llegar al hotel, bajamos a un supermercado que estaba junto al mismo,
donde nos aprovisionamos, allí se vió el primer chirrio en el grupo
por mi parte al abalanzarme sobre la botella de “Cacique”
y plantear un botellón en la habitación. Mis amigos me miraron con cara de sorpresa
y empezaron a “rajarse” (que mañana querían salir pronto rumbo a Francia,
que no querian pasarse, etc..),pese a todo..me permitieron comprar la
botella, aunque me dijeron que no iban a participar en su ingesta.
Pese a eso, trás la ducha y cuando empezamos a arreglarnos, cayeron un
par de copas por barba, que sirvieron para dar la “arrancadilla”, y mitigar
los cansancios típicos de la travesía…pero bueno, la gente no estaba
mucho por apalancarse en el hotel con el botellón y salimos a una hora prudencial
a cenar fuera e interactuar un poco.
Salimos en comanda, y yo como siempre bajé del hotel un poco a lo loco.
Sin movil y eufórico sali de toriles sin tomar las mínimas medidas referenciales
necesarias para no perderse a la vuelta de una noche de farra.
Bueno, la cosa es que la noche era bastante floja a nivel de marcha
y llovia copiosamente; cenamos en un restaurante regentado por una pareja
gay, comida depurada y atención esmerada, luego echamos un licorcillo y
una copa más, era la hora de salir a darlo todo ahí afuera!!
La lluvia a cántaros hacía de ese viernes algo desapacible, y la verdad es
que no había mucha gente, los bares estaban vacios y nuestro desconocimiento
de la zona tampoco ayudaba…al poco ya se empezaron a descolgar amigos,
que volvían a “boxes” a las primeras de cambio. Yo sin embargo estaba
animadillo, el alcohol estaba haciendo estragos a velocidad de crucero,
por lo que me animé a rematar el corner con otra unidad “R2d2″ que se sumó
a mis palos de ciego por la noche hostil.
La verdad es que yo me estaba poniendo pesao en mi “desarrollo del pedo”,
cosa que no suele suceder, vociferaba más de la cuenta, pero en fin,
ibamos cerrando bares que estaban casi vacios a un ritmo aceptable.
La cuestión es que acabamos en un tugurio de esos que tiene poca luz, una
mesa de billar y la flora y fauna habitual de dichos lares…cuatro gatos,
sulfataos como monos y con un buen rollito binario y momentaneo
pero que puede pasar del 1 al 0 y estamparte un vaso en la cabeza de manera arbitraria.
Yo, aprovechando mi estampa de galán etílico, me acerqué a una muchacha local..
de belleza y complexión bastante lamentable, pero bueno, la verdad
es que yo no iba a ser el que malograra nada esa noche…el desarrollo del
pedo debía irse produciendo..durante el penoso cortejo, mi único colega
abandonó la escena del crimen,buscando aires frescos tras unas chicas del Este,
estaba solo ante el “peligro”.
La cosa es que fuí arrimando material y notaba receptividad en el “bellezón”,
por lo que en una de mis peregrinaciones al baño para regular líquidos entre
copa y copa, compré dos condones (uno suele bastar en ese estado,
pero bueno, uno que es previsor…)y volví con mi dulcinea..Don Quijote, lanza en
mano la tomó por la mano y buscó un lugar con más intimidad, ya que el bar
los arrumacos ya estaban pasando de castaño a oscuro.
Yo me dejé llevar por las calles de la localidad, con la lucidez propia
de un ebrio semiempalmado, y acabamos en una campa junto a un riachuelo o algo así..
Allí procedímos al magreo y al proceso percutor…La verdad es que
para lo inóspito del sitio,(completamente despoblado y sin ningún
tipo de protección visual),me comporté,y lo di todo.. pero la verdad es que era incómodo,
tras un cierto rato, empezó a entrarme frio de estar con el culo al aire,
y a su vez me estaba jodiendo las rodillas con las piedras del terreno;
por lo que propuse ir a otro sitio (con mi segundo condón en la recámara).
Deambulamos otro buen trecho y acabamos en un aparcamiento,
en donde llamó a un coche en donde se encontraba una supuesta hermana,
con otro mendas en el tema copulativo,
al llamar ya se estaban arreglando tras el acto festivo.
El chico salío del coche y acto seguido se despidió y se marchó, yo entré en el vehículo.
Trás la euforia previa en la que fantaseaba incluso con el doblete,
me cercioré de la cruda realidad.
La hermana estaba hablando con la otra refiriéndose a mi de manera hostil
(imagino que picada por el hecho de que le cortáramos el rollo antes),
preguntándole que que coño hacía yo en el coche..la cosa es que me dejaron al poco por ahí tirado.
Yo no objeté nada en mi defensa,porque estaba pedo y con pocos argumentos a mi favor.
Cuando me bajé del coche, lamenté no haber tomado ubicación del hotel…no me acordaba
del nombre del sitio, solo sabía que estaba relativamente cerca del restaurante Gayer,
de un supermercado chikitin, y que se veía parte de playa desde arriba
(cosa muy normal en ese tipo de hoteles ochenteros bastante altos),
vamos que estaba más jodido que mi hígado en ese momento.
Decidido traté de orientarme entre las calles desiertas,
y si ya de por sí mi sentido de la orientación es un pufo,
potenciado por la fuerte cazalla, estaba bastante vendido.
A paso decidido, me pasé lo menos 45 minutos tratando de caminar hacia los edificios que veía altos
(que no son pocos por esas zonas), una estrategia lamentable..
Vi a lo lejos un coche deportivo, y me acerqué hacia él, dentro habia un tio
que era francés, aunque hablaba español, y traté de preguntarle,
aunque la verdad los puntos de referencia que le proporcionaba eran muy vagos.
Traté de explicarle que estaba cerca de un restaurante regentado por una pareja gay…
y al poco me dí cuenta del error que habia cometido..”Gay?”, me preguntó el tio
(el jodio eso si que lo pilló al vuelo,con una sonrisita,y esperando un gesto cómplice de mi parte..),
y yo viendo que me había metido en un jardín, me despedí simulando cortesía y tratando de poner tierra de por medio..
Mi peregrinación nocturna continuó…amplias calles desérticas,
vueltas concéntricas y de vez en cuando escondiéndome del francés que perdía compresión,
que estaba dando tb vueltas con el coche, esperando que ese borrachín que se hacia el duro cayese a sus pies…
Trás casi una hora, vi un coche a lo lejos de los Mossos d’Esquadra, y como
Tom Hanks en “Naufrago”,me abalancé sobre ellos, y traté de explicar ,
que no encontraba mi hotel, les dije con tono borrachuno:
“Es como un acertijo, solo sé que es un hotel alto, desde donde se ve el mar, y está cerca de un supermercado..”,
el Mosso me invitó a que entrara en el frío y aislado habitáculo plástico trasero de la patrulla y dijo con voz segura..”debe ser el XON’S”, en 2 minutos estábamos allí -la verdad es que estábamos cerca,
y me sonaba de haber pasado por ahí cerca varias veces…pero no habría dado con él ni de coña.
Cuando bajé del coche de los Mossos estaba exultante,
les dije,saliéndome del alma: “Ustedes si que hacen una buena labor social!!!”, y ellos entre sonrisas y como pensando…”ya te vale, borrachín”, me escoltaron hasta la puerta del hotel, no fuera a perderme en el camino..
Por cierto, a la mañana siguiente me dí, me levanté más doblao que Angel Cristo,
y cuando metí mi mano en el bolsillo trasero,
me dí cuenta de que el segundo condón que me quedaba era un paquete de chicles
tipo “Smint” que había pillado en la máquina creyendo que era un condón,
Conclusión, toma referencias antes de tomar copas, luego ya hay un punto sin retorno etílico!!
Veo que la noche empezo con las mejores intenciones, amistad, viajes, botellón y a darse un garbeo. El intermedio deambulatorio de bar en bar totalmente insatisfactorio desde un punto de vista estetico y social. Ahora bien, el climax a lo "jamon, jamon" del garito "mala muerte" resulta evocador. Del estilo, nuestro heroe sin un sitio donde volver, sin amigos a los que sablear y con un paquete de chicles en el bolsillo se enfila a la reina del lugar frente a una audiencia que no sabe si tanta alevosia es fruto de un desequilibrio mental o tal vez un nuevo chungo en la ciudad. Desde luego lo de subirse a un deportivo con un frances repeinado, en deportivo mientras suena Gainsbourgh en el radio-CD es un patinazo importante, mencionar el restau-gayer a la primera de cambio y sin venir a cuento es una incitación evidente.
ResponderEliminarMe imagino al dia siguiente los kilometros por las autopistas del sur de francia con las gafas de sol caladas y la mirada pérdida en el estúpido infinito.
En mi novata vida de perpetua etilidad jamás probé esa clase de noche fugaz con chinorri elevada a la sublimidad magestual.
ResponderEliminarSi más cabe la tocaya en cuestión rozaba el lado bueno de Vadder ( de perfil ) pero todo esto hay que mirarlo desde la distancia, al fin y al cabo las judías del día siguiente levantaron en mi la malignidad de las gaseosas el tigre.
PD. Los mossos buenas chens
Los vapores etilicos suelen favorecer las malas decisiones (como la del frances del deportivo) sin embargo (Dios apreta, pero no ahoga) otros gases, los flatulentos suelen ser el antídoto ideal para esas malas decisiones.
ResponderEliminar